NUESTRA HISTORIA

NUESTRA HISTORIA

Somos una empresa acorde a nuestros tiempos, sin embargo no nos olvidamos de nuestros orígenes que se remontan al siglo pasado cuando nuestra familia decidió elaborar sobaos y quesadas. Fijamos nuestros objetivos en el futuro sin olvidarnos de nuestra historia.

La Casa El Macho comienza su actividad con nuestros abuelos, Gumersindo García González y Matilde Sainz Güemes, unos años después de terminada la guerra civil, a mediados de los años 50. Ellos regentaban un pequeño local en Selaya, una taberna-tienda que hacía las veces de Bar y venta de comida.

Ahí Matilde empieza a elaborar quesadas para la gente que visita el pueblo, sobre todo en fiestas. En los fines de semana también llegaban visitantes, que se acercaban a bailar junto a los del pueblo, al ritmo del organillo, en el pequeño salón de baile que nuestros abuelos abrieron al lado de la taberna-tienda.

Con el tiempo ese salón se convierte en lugar de celebración de banquetes de Bodas, en los cuales se solía dar de postre la quesada. Ésta adquiere fama y posteriormente, sobre finales de los 60, Matilde y Gumersindo comienzan a fabricar los sobaos en la panadería del pueblo. Luego también usan un pequeño horno que compraron y venden sobaos en la taberna-tienda.

Sobre los años 70 compran la primera amasadora y el lugar destinado a salón de bodas y baile pasa a ser obrador de sobaos y quesadas.

Después de la muerte de Franco el país va cambiando y con él la sociedad en general. A mediados de los años 90, concretamente en 1995, la empresa se muda a los locales en donde está ubicada ahora.

En todo este periodo de tiempo, el manejo de la empresa ha pasado de Gumersindo y Matilde hasta la actual tercera generación.